miércoles, 4 de septiembre de 2024

CÁSCARAS

 

Cáscaras es a Cascotes como Cascotes es a Cáscaras. Cáscaras y máscaras difieren tan solo en la primera consonante. Y máscaras y mas caras se llevan un acento y un espacio entre letras. Cuando los arquitectos de ahora guardan las cáscaras de lo que fue la arquitectura de verdad, o sea, la de antes de la modernidad, las obras salen más caras y encima salen Cascotes. 


Me cuentan que para dar lustre al inicio del curso del Instituto de Haro, el primer claustro lo han celebrado en el salón de actos de la cáscara de arriba, el edificio de viviendas reconvertido en "cultural",  llamado ahora María Díaz. Prueba irrefutable de que las enseñanzas medias ya no son sino la cáscara de lo que fueron. 


El equipo de sonido tiene un armario para  ocultarse como los contadores de agua o de luz, lo que pasa es que cuando se usa tiene que estar abierto y afea un poco la tersa e inmaculada blancura del interior.  

Siguiendo este enlace pueden ver más fotos de otros interiores del edificio igualmente blancos, aunque decorados con botellas de vino, que para estamos en Haro. 

Prometo seguir con lo de las cáscaras..., y la enseñanzas: los del Instituto Sagasta de Logroño no necesitan ir a hacer su claustro de comienzo de curso,por ejemplo, a las modernas bajeras del IRJ (Instituto Riojano de la Juventud), porque desde que se "rehabilitó" ya es una cáscara de sí mismo. O una máscara con los ojos vacíos.