martes, 10 de diciembre de 2013

262. CENTROSDEINTERPRETACIONITIS



Dícese de la infección (primero) y epidemia (después) que afectó a los alcaldes de municipios menores de treinta mil habitantes y presidentes de Diputaciones sin término municipal propio a los que no se les tenía permitido construir un museo o un teatro.


El descubrimiento del brote infeccioso y la denominación de la epidemia fue mérito de mi amigo Iñigo Jauregui Esquivela en un memorable artículo para el suplemento EL CAMPO que edita el diario LA RIOJA (no sé donde lo guardé pero guro que el mérito es suyo), región, La Rioja, en la que hemos llegado a levantar hasta un Centro de Interpretación del Esquilado de las Ovejas (!)


Pero no todo hay que verlo desde el lado cómico pues es notorio y sabido que los Centros de Interpretación han sido una de las catapultas más útiles y provechosas para los así llamados arquitectos emergentes.


O que despuntan, o que quieren salir en las revistas del ramo, vaya.


Ni que decir tiene que buena parte de todas estas maravillas arquitectónicas sobre las que poco o nada tengo que decir, las he descubierto gracias a las generosas aportaciones de los encofrades del grupo SEMS de facebook al que todos uds lectores del CASCOTES están invitados a pertenecer bajo preceptivo juramento, sesión de investidura y vela de armas en el centro de interpretación que lo deseen y a elegir.


Vayan viendo y admirando y verán que no lo tienen fácil. Lo de elegir Centro de Interpretación, me refiero. Si sois de por aquí, este os pilla a un paso, en Vitoria.


Este otro no, que está en Cádiz y encima interpreta la prehistoria. Aunque lo que interpreta cada Centro de Interpretación es lo de menos: lo importante es que a alguien se le ocurrió, a alguno se lo encargaron, otro alcalde lo inauguró, y este pícaro gordo, viendo que era ruinoso, fue y lo cerró.


Ay dios, en este que acabo de ver que se interpreta la Batalla de Bailén. No dice la arquitectura de quién es la música ni de quién la letra, pero por las convulsiones de la fachada seguro que deja a Wagner a la altura del zapato. 


Mira, en este interpretan el Cinca, que es un río más modesto que pasa por Valladolid. ¿Por Valladolid? Me da que no, pero es igual porque lo que pone en los paneles de dentro no lo va a leer nadie. 


Aparte de paneles bien diseñados, los Centros de Interpretación hacen mucho bien por la promoción de las artes figurativas. Véase el caso y volvamos a la arquitectura antes de que nos dé un patatús.


Para interpretar los Picos de Europa, por ejemplo, que no son de Europa sino de Santander, se ha optado por una sencilla caja geométrica que contrasta con la caótica y caprichosa morfogénesis de los picos en sí. 


En esta pequeña caja, sin embargo, se interpreta Málaga, del maestro Falla, que no falla como Málaga, que a fuerza de fallar está casi peor que los picos de Europa o de Santander (homenaje al gran encofrade de SEMS don Anton Ozomek). 


Como Cuenca es algo más que un pueblo o una Diputación, el Centro de Interpretación Ars y Natura, es más que un Centro de Interpretación. Casi un museo diría yo. 


Y aunque el Cinca no pase por Valladolid, que todo podría ser, también tienen allí naturaleza que interpretar, arquitectos con ganas de ser Mies van der Rohe y alcalde que ya no sabe qué otro museo hacer y decide levantar otro Centro de Interpretación. 


Entre las piezas más interpretacionables e interpretadas por nuestros arquitectos se lleva la palma el desarrollo sostenible, ambiental y esparcimiento ecocultural, todo seguido, sin pausas ni silencios. 


Además, lo bueno de los Centros de Interpretaciones es que mientras algunos alcaldes andan cerrando los suyos, otros los están abriendo de donde se deduce que la epidemia va por barrios o por vasos comunicantes. Lo que no varía es lo de la geometría (o cúbica o convulsa) y lo del material (hormigón o acero corten).


Como este es de granito y puesto en vertical se debe de interpretar algo raro que no sé lo qué. Porque la norma es interpretar ruinas y con chapones marrones, como este otro tan bonito:


Voy acabando que ya no sé por donde iba. Ah sí, por la interpretación de la Tinajería en Villarrobledo. Se lo cuento antes de que crezcan los cipreses y tapen la leyenda de la chapa oxidada. 


La riqueza tipológica y formal de la joven arquitectura española es de tal categoría que en la misma Pamplona te interpretan la ganadería así de guay:


Y ya no les digo como interpretan el urbanismo sostenible en los polígonos sin construir de Zaragoza porque lo mismo no se me sostienen Vds, pero allá va:


Del Centro de Interpretación de los Cetáceos del Estrecho de Gibraltar en Tarifa sólo sé que está pronto a inaugurarse y que hasta que no quiten la sábana no lo vamos a ver, pero como adelanto les pongo la maqueta.




Porque la epidemia no para y hasta que no adelantemos a Finlandia en el informe Pisa, no vamos a cejar en el empeño de que nuestros niños y mayores aprendan de todo sin mayor esfuerzo. 


Me dejaba éste, que está en Portugal, región hermanada con Eppaña en la Interpretacionitis y la Arquitecturitis. Y de seguir así, pronto también en el Pisa. 

Y me dejo cientos más de ellos, pero es que esto no es un Museo sino un Centro de Interpretación de los Centros de Interpretación. 

Ahhh.