En un viejo artículo de mi primer blog di a luz al palabro ticsturas para ponerlo luego como etiqueta de todos aquellos edificios que por no tener la entidad de coger una guguengitis se conformaron con una ticsturitis. El caso es que después de inventarla no le di apenas uso, con todo lo que han sangrado mis ojos desde entonces por ver cosas así. Este adifesio de Adelaida, capital de la Australia Meridional es un centro de investigación médica que bien podía dedicarse a la curación de lesiones de la piel por erosión porque es todo él como un rayador de pan. Santo cielo, ¿qué tendría su arquitecto en la cabeza?